viernes, 9 de octubre de 2009

¿Las niñas bonitas tienen la vida resuelta?


El día de ayer me dí cuenta que en la vida cotidiana existen muchas injusticias, muchos dirán “¿apenas te diste cuenta? ¡¡¿Vivías en una burbuja?!!”, lo cierto es que creo mi nivel de paciencia llegó a un límite, me dí cuenta que a veces en el trabajo no es suficiente que seas puntual, responsable, trabajadora, sino que sigue predominando el instinto animal entre los que tienen el mando; ¿a qué me refiero? pues simple y sencillamente que muchos de los jefes se guían por lo que les dicta el pene…

Créanme siempre he sido defensora de las mujeres, pero llega el momento en que odio a algunos espécimenes de mi género. Si ya sé, seguramente al leer esto estas pensando: “es la típica amargada que odia a las bonitas”, pero mejor les expongo el caso que una amiga me contó:

Esta historia es de Liliana mi amiga y Elena la bonita, pues ellas trabajan en una misma empresa, pero en distintas sucursales de México, Liliana como les comentaba anteriormente siempre ha sido muy responsable, en el tiempo que lleva en su trabajo, ha tenido altas y bajas, a veces los aumentos de sueldo vienen cada año y eso porque no les queda de otra, hasta la fecha sigue preparándose porque le gusta y ama su trabajo. Afortunadamente, su forma de realizar sus labores la ha recomendado ante los demás y creo que nunca ha tenido queja alguna por parte de sus jefes, pero le ha costado mucho llegar hasta donde esta, porque todo lo obtiene mediante su esfuerzo…

Por otra parte, Elena entró tiempo después que Liliana, la diferencia es que desde un principio ha tenido muchas ventajas, por ejemplo, después de trabajar en la empresa un año decidió pedir un permiso, pero que probablemente para ya no regresar, su jefe que está enamorado de ella, obviamente se lo concedió y le dijo que podría regresar cuando quisiera. Al cabo de un año efectivamente regresó, con sus mismas ventajas y beneficios; lo curioso es que todos sus compañeros hablan pestes de ella porque comete tontería tras tontería, pero ella sabe que puede solucionarlo con una sonrisita idiota y coqueta para con su jefe…

Bueno mejor vayamos a lo que considero injusto, resulta que una amiga de Elena se casó y como el jefe de la empresa también estaba invitado pues obviamente se enteró del viaje, la injusticia radica en que le pagó el avión, hospedaje, alimentos etc y lo peor con el dinero de la empresa. Mientras que cuando Liliana necesita algún apoyo, simplemente le posponen o cancelan su petición. Hasta donde sé Liliana y su jefe no tienen que ver, pero el jefe es de los típicos tipos “perros”, que está buscando el momento en el que afloje.

Todo esto me lleva a hacerme muchos cuestionamientos, ¿será que el ser bonita te abre las puertas? ¿Será que la clave del éxito radica en coquetear lo más posible? ¿Será que en vez de superar el concepto de la mujer como “objeto sexual”, se prefiere seguir en la comodidad de usar tu encanto como arma?

Lo único que puedo decir es que en mi país seguimos viviendo en un atraso mental, pues pocos se detienen a ver las cualidades verdaderas de las mujeres y del potencial que pueden representar a nivel empresarial, limitándolas a una “vagina disponible” en algún momento…

En futuras entregas les platicaré más historias, con situaciones que a lo mejor alguna vez han vivido.

1 comentario:

RAE dijo...

Hola, bueno en primera es cierto que todos los hombres machos -me refiero a la preferencia- somos puercos, solo que todos tenemos limites diferentes -frenos de mano, si quieres verlo de esta manera- yo por ejemplo en el trabajo separo mucho eso - y si, soy un puerco- ya que al final de cuentas el trabajo –o babosadas- que una "bonita" no hace/ hace, alguien mas lo debe de hacer /corregir.

En segundo pues Liliana por lo que cuentas debe estar muy preparada o no tanto para soportar lugares donde no la tratan tan bien como las "bonitas", quizá no le interesa un nivel de igualdad, y solo no quiera problemas -estado de confort-; por otro lado el Jefe de Elena, o es un puerco con limitantes -freno de mano- en el trabajo o un pendejo ya que dar tanto a alguien -sea por negocio o placer- y no recibir nada a cambio pues....

No te enfades... yo estoy convencido de que existen lugares mejores conde el mejor sobresale no importa si esta bueno(a) o no. Me consta.